También me imagino aquellos gritos desaforados que habrían dado sus congéneres cuando vieron aquello. ¿Y qué me dicen del gago primitivo tratando de explicar el hallazgo de caza en el valle vecino? ¿Y del pobre cojo tratando de atrapar a un bebé dinosaurio para su desayuno? ¿O del pobre mudo enamorando a la cromagnona? Quizás fue uno de ellos quien dio el primer garrotazo como símbolo de hambre sexual al ver que la dama no lo entendía e impuso esta costumbre entre la manada. Recuerdo, por mis estudios, que en la época medieval, las mujeres eran sometidas a las más ultrajantes torturas. No hablo de los férreos corsets que les hacían perder la respiración, ni de los aros de metal en que enjaulaban sus hermosas curvas, sino a aquellos cinturones de castidad que guardaban al señor la fidelidad de su esposa mientras él andaba por esos condados, marquesados y ducados, follando con cuantas mujeres se les metiera por medio. A propósito, aquí les va este cuento que era la delicia de nuestro profesor de Historia Universal en nuestra etapa de estudiantes.“Cuentan que un Duque, al salir en una de aquellas campañas, le coloca a su esposa el cinturón de la virginidad y le hace entrega a su fiel mayordomo de la llave del mismo. Con esta confianza en el corazón y las armas en ristre, salió el caballero por el polvoriento camino con sus docenas de soldados, pero a la media hora de trayecto le avisan desde la retaguardia, que se acerca un jinete a galope tendido. La caballería se detiene bajo el inclemente sol y, sudando a chorros debajo de aquellas vestimentas y corazas, esperan a que se acerque quien no era más que el mayordomo con un brazo en alto y en su extremo, abrillantada por el sol, la lllave dejada en custodia.Ya, a escasos metros, se escucha la voz firme del mayordomo:-¡Señor Duque, usted se ha equivocado, esta no es la llave del cinturón de su señora!.”Recuerdo que en mi juventud, vestir un pantalón a cuadros era un delito de lesa falta de gusto lo cual se pagaba con las mayores de las burlas y las risotadas más estridentes, pero además, al que se le ocurriera combinar dicho pantalón con una camisa a rayas o cuadros, ¡je!, entonces era cuando.De cualquier lado surgia aquello de ¡ESTAS TREPA’O! ¡TE VA A COGER LA POLICIA!, etc.Lo que demuestra que la moda, en la época que sea, venga del país que venga o la diseñe quien la diseñe ha marcado un hito en la historia del humorismo a escala universal.(Recuerden aquellos sombreros que utilizaban nuestras abuelas y abuelos en su juventud.) El humor se ha vuelto mucho más profesional, hay que tener INGENIO para hacer reir y hay ejemplo de ello. Recuerdo las escapadas que se daba del libreto Enrique Arredondo, nuestro siempre querido Bernabé, o las trapisondas de Leopoldo Fernández en sus personajes clásicos e inolvidables de Pototo o Tres Patines. En República Dominicana, Beras Goico y Luisito Martí, enmarcan la excelencia, el respeto y la maestría para hacer reír.
Espero que algún día nuestros escritores y productores hispanos de programas de humor, tanto de radio como de televisión dejen a un lado toda esta parafernalia, que lejos de demostrar destreza humorística, evidencia cortedad de ideas y poca o ninguna aptitud natural (léase TALENTO) para estos tipos de libretos. DIMES Y DIRETES La mitad de la alegria reside en hablar de ella. (Proverbio PersaEn los aviones el tiempo pasa volando. (Anónimo)No podemos estar enojados mucho tiempo con alguien que nos hace reir (Jay Leno)
El humor es un caos emocional que se recuerda con regocijo. (James Thurber)
El eco siempre dice la última palabra (Anónimo) No está mal una mala mentira cuando con ella defendemos nuestra verdad. (Jacinto Benavente)
La gente buena, si se piensa un poco en ello, ha sido siempre gente alegre. (Ernest Hemingwey) Todavía no se han levantado las vallas que digan al talento: "De aquí no pasas". (Bethoven)
Hay quienes tienen un gran talento para demostrar su falta de talento. (Yo)
Enlaces:
www.mailxmail.com/curso/excelencia/tecnicascreacionhumor/ www.tebeosfera.com/Obra/Libro/Monografia/Portugal/HistoriaHG.htm www.casadellibro.com/
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