Oh, Camagüey, oh suave
comarca de pastores y sombreros!
(Nicolás Guilén)
A MODO DE EXPLICACION 
Luego de concluir el decimario, Razones de la memoria, me enfrento nuevamente al verso octosílabo. Esta vez, deseo reafirmar con el mismo punto de vista, aquellas locaciones, aquellos paisajes, los solitarios y a la vez, multitudinarios rincones y plazas de mi ciudad natal. Con el mismo punto, es el título de la nueva empresa a que me arriesgo. Con el mismo punto de vista y con la misma convicción de mis años vividos junto a mi pueblo. Quiero, sin embargo, que sea un libro argumentativo y sanamente digerible. Con el formato del punto cubano, (de ahí también con el mismo punto) la décima. Con el alma puesta en los símbolos inconquistables de nuestra cubanía: la palma real, la mariposa blanca, el colibrí, las anchas llanuras de mi provincia, los ríos y su gente, esos callejones de mi ciudad, esas amplias avenidas abiertas al frenesí de sus leyendas, aquellos ventanales arabesquedos.
Saludo desde ya, los primeros versos conformados en esos momentos
Luego de concluir el decimario, Razones de la memoria, me enfrento nuevamente al verso octosílabo. Esta vez, deseo reafirmar con el mismo punto de vista, aquellas locaciones, aquellos paisajes, los solitarios y a la vez, multitudinarios rincones y plazas de mi ciudad natal. Con el mismo punto, es el título de la nueva empresa a que me arriesgo. Con el mismo punto de vista y con la misma convicción de mis años vividos junto a mi pueblo. Quiero, sin embargo, que sea un libro argumentativo y sanamente digerible. Con el formato del punto cubano, (de ahí también con el mismo punto) la décima. Con el alma puesta en los símbolos inconquistables de nuestra cubanía: la palma real, la mariposa blanca, el colibrí, las anchas llanuras de mi provincia, los ríos y su gente, esos callejones de mi ciudad, esas amplias avenidas abiertas al frenesí de sus leyendas, aquellos ventanales arabesquedos.
Saludo desde ya, los primeros versos conformados en esos momentosde asombro y sorpresa ante la palabra.
CAMAGUEY
Mi Camaguey nocturnal
de calles y callejones
donde encendí mis pasiones
como un candil colonial
Tan legendario y cabal,
tan entusiasta y vehemente;
hoy que te llevo en la mente
y en el latir de mis venas
te guardo junto a las penas
y alegrías de mi gente
2
Si a Camagüey tu lo tienes
visto desde gran altura
veras su agreste figura
cruzada de terraplenes.
Si en la ciudad te detienes
veras su estructura recia
haciendo una peripecia
entre calles y avenidas
y en acrobacias suicidas,
las torres de sus iglesias
3
Camina por Camagüey
huele sus tantas leyendas
para que al menos aprendas
lo que es duende y curujey
Arranca el verde yarey
de la penca de esa palma
Mira esta ciudad con calma
llena de aire tus pulmones
y bebe de sus tinajones
toda el agua de su alma
RIOS
1
El Tínima silencioso
va entre juncos y palmares,
los guayabos y azahares
del limonero vistoso.
Yo lo veo en ese hermoso
presentimiento de fuente
llevar hacia el occidente
de mi provincia natal
alboradas de cristal
adornando su corriente
2
Une sus aguas después
al Hatibonico airoso
y se hace más presuroso
su andar de líquidos pies
.
Porque ya no es río, es
entre el júcaro y el cedro
figura del poliedro
del campo camagüeyano
culebreando campechano
con el nombre de San Pedro.
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