(...)Cuando pinto emprendo esos giros aéreos tan necesarios como bellos y soy feliz, se detiene el tiempo, el hambre, hasta la vida por el goce de crear(...)
Cristina Valle
Sucedió, como un sacudimiento, como una fiebre. Mi intuición llamaba a la razón para que comprendiera aquella eclosión de colores, aquellas líneas, aquel conjunto galáctico, que uno tras otro se iban sucediendo como una irrealidad otra, en una dimensión fantástica y a la vez real.
Ella, Cristina Valle, la autora de esta conmoción sensorial, me dice, con una inocencia que asombra:
(...)Empecé desde siempre, no se si hubo un cuándo(...)
Su pintura es un diagrama sorprendente, es como plantarse en el centro de la galaxia y desde allí ver oscilar los astros, girar las estrellas, oler el polvo cósmico, zambullirse, en fin, en esa salvaje y palpitante vida astral.
Naci un 5 de julio de 1952 en Lomas de Zamora Buenos Aires, Argentina mi papa era médico clínico mi mamá una gran mujer(...)
Y paso de la realidad de sus palabras, al sueño, vuelvo la vista a sus dibujos de un formato exquisitamente excelente, es la poesía en pinceladas, el verso convertido en un prismas de colores abordando fantasías y empeños especiales. en sus vértices.
‘(…) mi mejor maestra fue Mimí, profesora de pintura del colegio secundaria ella me enseñó a ser libre pero más que eso a ser!y desde ahi sea tal vez cuando fui y cuando soy asi: libre(…)’
En la breve cuadratura de su espacio los colores resaltan con esa inocencia propia de quien sabe que va a convertirse en sugerencia o sueño. Frente a esta magnificencia tome lápiz y papel y escribí lo siguiente.
POSTAL
Rompe el día su velo de victorias
su infancia de jardines, su agonía;
un espacio de nuevas trayectorias
se suman al celeste nuevo día.
Un rojo que se eleva en la porfía,
un verde que se filtra en el encaje,
el azul apresado en el celaje,
oriflamas de pompas y reflejos.
La aurora se rompe en los espejos
bordando el sol su oro en el paisaje.
Cristina Valle opta por la suprema e infinita valoración de su obra pictórica mucho más allá de las prioridades humanas.
Su infancia fue de una transparencia y una felicidad increíbles. Dice ella.
(…)‘tuve una infancia muyyyyyyyyyyyy feliz y siempre fui alegre y divertida jamás fumé ni bebi alcohol siempre me sobró imaginación (…)’
Y hay que creerle aunque no le vea el rostro, porque esta conversación fue por medio de mensajes cibernéticos.
Volviendo a su obra pictórica, vemos a una mujer totalmente satisfecha con lo que hace , porque no hay en todo el círculo de la creación humana algo que se asemeje más a la cosmogonía, que la fusión entre colores y la palabra en su misterio poético.
‘(…) después estudie en ciencias sociales una licenciatura en publicidad con tesis sobre el color y el psicoanálisis me enamore del color de su textura de su perfume de su música ciertas asignaturas como semiología linguística y otras, afianzaron mi confianza para editar mis versos. Así nacieron mis seis libros de poemas (…)’
Esa conmoción en equilibrio lo trabaja Cristina con sus poemas que podemos leer visitando
http://www.revista.agulha.nom.br/bh27valle.htm
Ya para terminar quedémonos con estas palabras de la artista, todas ellas llenas de ese encantador mensaje de modestia :
amo la poesía de la vida los pájaros las bicicletas el mar y los claros de luna(…)’
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